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Bacillus
anthracis
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El
ántrax o carbunco es una enfermedad infecciosa aguda que
normalmente afecta a vertebrados salvajes y domésticos (ganado, ovejas, cabras,
camellos, antílopes, y otros herbívoros), pero también puede afectar a
humanos cuando se exponen a animales infectados o tejidos de animales
infectados.
El ántrax es una infección humana poco
frecuente y esporádica en la mayoría de países industrializados. Es
principalmente un riesgo profesional de obreros que procesan pelo o hueso, de
veterinarios y agricultores. El ántrax humano es endémico en regiones agrícolas
del mundo donde el ántrax en animales es común; éstos incluyen países en Sur
y Centroamérica, Europa del sur y oriental, Asia y África. El ántrax es
considerado un agente potencial en bioterrorismo y guerra biológica y, como
tal, podría presentarse epidemiológicamente en circunstancias raras.
Agente etiológico
El
ántrax es una enfermedad infecciosa aguda causada por Bacillus anthracis,
una bacteria Gram positiva, aerobia formadora de endoesporas, encapsulada, que
puede cultivarse en medio ordinario. La célula vegetativa es grande (1-8 µm
en longitud, 1-1.5 µm en anchura). el tamaño de la Espora es aproximadamente
1 µm. Las esporas crecen rápidamente en todos los medios de cultivo
ordinarios de laboratorio a 37°C.
Su morfología celular y colonial permite su identificación por un microbiólogo
experimentado, aunque pocos microbiólogos fuera de la comunidad veterinaria han
visto colonias del ántrax mas que en libros de texto.
Los tres factores de virulencia son: la toxina del edema, la toxina letal y un
antígeno capsular.
Etimología
: Anthracis deriva de la palabra griega
para carbón, anthrakis, porque la enfermedad causa lesiones superficiales
negras como el carbón.
Patogenicidad
No se reconocieron las propiedades toxicas de B. anthracis hasta 1954.
Anteriormente, debido al tremendo número de bacterias observado en sangre de
animales infectados (>109 bacteria/ml), se suponía que la muerte era debida
a la obstrucción capilar.
Pero experimentalmente se demostró que sólo aproximadamente 3 millones de células/ml
son necesarias para causar la muerte
del animal. Además, el plasma de células
de animales infectados tiene una toxina que causa los síntomas del ántrax
cuando es inyectada en los conejos normales. De estas observaciones se deduce
que una exotoxina juega un papel importante
en la patogénicidad del ántrax.
Cepas:
Hay dos variantes coloniales
Liso (S) a Áspero (R) que están relacionadas con la habilidad de formar
la cápsula. Las variantes de R son relativamente avirulentas.
La cápsula no es toxica, actúa como
protección contra la fagocitosis, y juega su papel más importante durante el
establecimiento de la infección, y un papel menos significante en las
fases terminales de la enfermedad que es mediada por la toxina del ántrax.
Un componente de la toxina del ántrax tiene un modo de acción letal no
descubierto en este momento. La muerte es aparentemente debida a la falta de
oxigeno, shock secundario, permeabilidad vascular aumentada, fallo respiratorio
y fallo cardíaco. La muerte en humanos y en animales experimentales
frecuentemente ocurre de repente e inesperadamente.
Modo de transmisión
Los modos de transmisión del ántrax en situaciones normales son:
-El Cutáneo por contacto con tejidos de animales (ganado, oveja, cabras,
caballos, cerdos y otros) infectados, por contacto con pelo contaminado, lana, o
los productos fabricados con ellos, como tambores, cepillos o alfombras,
o por contacto con tierra asociada con animales infectados. Los artículos
y tierra contaminadas con esporas pueden seguir siendo infectivos durante décadas.
-El ántrax por inhalación es el resultado de la inhalación de
esporas en procesos industriales arriesgados, como curtir pieles y procesar lana.
-El ántrax intestinal se
debe a la ingestión de carne sin cocinar contaminada; no hay ninguna evidencia
que la leche de los animales infectados transmita ántrax.
La transmisión de persona a persona
es muy rara.
Existe una variación considerable
en la susceptibilidad genética al ántrax entre las especies animales. Los
animales resistentes entran en dos grupos: (1) resistente al establecimiento de
ántrax pero sensible a la toxina y (2) resistente a la toxina pero susceptible
al establecimiento de enfermedad.
Los animales que sobreviven al ántrax adquirido naturalmente son inmunes a la
reinfección. Segundos ataques son sumamente raros. La inmunidad permanente al
ántrax parece requerir anticuerpos a la toxina y al polipéptido capsular, pero
la importancia relativa de los dos tipos de anticuerpos parece variar
ampliamente en animales diferentes.
Clínica
El ántrax humano tiene tres formas clínicas: cutánea, por inhalación, y
gastrointestinal.
El ántrax cutáneo resulta de la
introducción de la espora a través de la piel; el ántrax de la inhalación es
a través del tracto respiratorio, y el ántrax gastrointestinal por ingestión.
En el cutáneo primero se produce picor superficial en la zona donde se produce
la penetración, seguido por una lesión que se vuelve papular, después
vesicular y en 2-6 días desarrolla un
chancro negro deprimido. El chancro normalmente se rodea por un edema
de moderado a severo y muy extenso, a veces con vesículas secundarias
pequeñas.
Las infecciones no tratadas pueden extenderse a los nodos de la linfa regionales
y al torrente sanguíneo con una septicemia aplastante. El ántrax cutáneo no
tratado tiene una proporción de muertes entre el 5% y
el 20%, pero con terapia antibiótica eficaz, ocurren pocas muertes.
Los síntomas iniciales del ántrax por inhalación son apacibles y no
específicos y pueden incluir fiebre, malestar y tos apacible o dolor del pecho;
los síntomas agudos de dolor respiratorio, fiebre y shock aparecen en 3-5 días,
produciéndose la muerte rápidamente después de esto.
El ántrax pulmonar se adquiere inhalando esporas del bacilo que son lo
suficientemente pequeñas como para penetrar muy adentro en los pulmones, aparece después de la rápida multiplicación
de las esporas en los ganglios linfáticos del mediastino. Se desarrolla una
linfadenitis hemorrágica necrosante severa que se extiende por las estructuras
mediastínicas adyacentes. Hay trasudado serosanguinolento, edema pulmonar y
derrame pleural. Los síntomas iniciales son insidiosos . Al principio, la
enfermedad tiene síntomas parecidos a los de una gripe severa: tos, dolor
muscular, de cabeza y de pecho; luego la enfermedad se torna más severa, hasta
producir un estado de shock en el cual muere el 95% de los afectados. La radiografía de tórax muestra una infiltración difusa en
placas; el mediastino se encuentra ensanchado a causa de las adenomegalias
hemorrágicas. La enfermedad sólo puede controlarse si se empieza un
tratamiento drástico con antibióticos dentro de las primeras 48 horas de
iniciarse los síntomas. Sin embargo, debido a que en sus primeras etapas la
enfermedad es difícil de diagnosticar, generalmente los afectados pocas veces
reciben el tratamiento oportuno.
El ántrax intestinal es raro y más difícil reconocer.
La confirmación de laboratorio se hace por aislamiento de B. anthracis de
la sangre, lesiones superficiales, o las secreciones respiratorias mediante
tinción con azul de metileno (M'Fadyean),
o por cultivo o inoculación en ratones, o conejos. Se puede realizar la
identificación rápida del organismo por immunodiagnóstico, ELISA y PCR.
Diagnóstico.
La historia clínica, que incluya la profesión del paciente
y el contacto con posibles animales enfermos, es fundamental.
En el carbunco cutáneo la lesión descrita es altamente sospechosa
del cuadro. Se debe obtener una muestra a
partir de la serosidad o del líquido de las vesículas y someterla a
una tinción para observar los típicos bacilos antes descritos.
Puede emplearse una tinción de Gram con anticuerpos fluorescentes.
En todos los casos hay que realizar un cultivo
en medios habituales para comprobar que estos bacilos esporulados
son aerobios, inmóviles, capsulados, se lisan por
fagos específicos (g, W y L) y producen un poder patógeno experimental
en el cobayo. Todo ello diferencia a B. anthracis de
las numerosas especies saprofitas del género Bacillus, denominadas
"antracoides". De la misma forma
se deben procesar las muestras de esputo, líquido
pleural, vómitos, heces, LCR y sangre (el hemocultivo se
hará sistemáticamente), según las sospechas del cuadro
clínico.
El diagnóstico indirecto mediante microhemaglutinación en
muestras dobles de suero permite comprobar el aumento del
título de anticuerpos, que por otra parte puede estar elevado en
individuos recién vacunados.
Tratamiento.
El antibiótico de elección es la penicilina G, que
debe administrarse lo más precozmente posible, en dosis de
2-3 millones de unidades, cada 4-6 horas, al menos durante 7
días, tambien son utiles los macrolidos y quinolonas como la criprofloxacina. Si el cuadro es grave o se trata de localizaciones no
cutáneas, como el ántrax pulmonar, un tratamiento i.v. precoz con 20
millones U/d de penicilina G puede salvar la vida del paciente. Este fármaco se
ha utilizado en combinación con la estreptomicina, a dosis de 500 mg i.m. c 8 h
en los adultos y de 25 mg/kg/d en los niños. Los corticoides podrían tener
alguna utilidad, pero no se han evaluado adecuadamente. Si el tratamiento
fracasa, en general a causa de un error diagnóstico, es probable que sobrevenga
la muerte del paciente.
Profilaxis.
Las mejores medidas para la prevención de la enfermedad
en los individuos expuestos son la protección de
piel y mucosas y la vacunación. Es importante el uso de guantes
y mascarillas, para lo cual se requiere una educación sanitaria.
Vacunación
La vacuna, realizada con el antígeno protector purificado,
requiere tres inyecciones subcutáneas de 0,5 mL con
2 semanas de intervalo, y una dosis de recuerdo anual.
Vacunas compuestas del bacilo muerto y/o los antígenos capsulares no producen
inmunidad. La cadena externa de B. anthracis produce cantidades
subletales de la toxina que induce la formación del anticuerpo proteccionista.
La vacuna del ántrax para humanos
que se usa en EE.UU. es una preparación del antígeno proteccionista recuperada
del filtrado de un cultivo avirulento. El producto final contiene no más de 2.4
mg de hidróxido de aluminio
Actualmente la vacuna del ántrax se fabrica y es distribuida por BioPort
Corporation, Lansing, Michigan, bajo contrato con el
departamento de Defensa, y se producen sólo cantidades pequeñas
disponibles para individuos que están expuestos al ántrax en su ambiente de
trabajo
La vacuna está indicada para individuos que entran contacto en el lugar de
trabajo con pieles de animales importadas, deshuese, carne, lana, pelo animal
(sobre todo el pelo de la cabra) y cerdas; y para individuos comprometidos en
diagnóstico o actividades de investigación que pueden entrar en contacto con
esporas del ántrax, como veterinarios, empleados de laboratorios y a el
personal militar destinado a áreas con alto riesgo a la exposición al
organismo (como cuando se usa como una arma de guerra biológica).
La vacuna sólo debe administrarse a los individuos saludables de 18 a 65 años
de edad. No se sabe si la vacuna del ántrax puede causar daño fetal, y no
deben vacunarse mujeres embarazadas. La inmunización consiste en tres
inyecciones hipodérmicas cada dos semanas, seguidas por tres inyecciones hipodérmicas
adicionales cada 6, 12, y 18 meses.
Se exigen inyecciones de recuerdo anuales de la vacuna para mantener la
inmunidad. Y genera una inmunidad cercana al 93%
Bibliografia:
1-
ANTHRAX Guerra Bacteriológica en <http://members.es.tripod.de/MundoBiotek/anthrax.htm>
consultada el [23/10/2001]
2-
Piédrola Angulo G., Infecciones por Bacillus. Carbunco en (Farreras/Rozman) ed
en CD ROM, 1996; 2336-7
3-
Cevallos M. A, Armas biológicas en <http://www.comoves.unam.mx/articulos/armasbiol.html>
consultada el [26/10/2001]
Más
información: Antrax
y la Guerra Biologica
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